Cuando estas decidido a beber alcohol, lo haces por algo. Nadie va por la vida deseando terminar inconciente con la cabeza en el teclado, esperando respuesta a tu comentario de Facebook. No importa que tan importante sea para ti la respuesta.
Y no importa si la respuesta viene volando a veinte mil pies de altura, desafiando las leyes de etiqueta aeronáutica, que impiden a los usuarios usar mas de un asiento para “descansar los ojos”.
Lo que importa es que en tierra firme haya algún obediente de la ley de gravitación universal, que te espere con una botella de whisky barato y muchas ganas de discutir los pormenores del diseño de experimentos de Taguchi.
Lo malo es cuando, la decisión de embriagarse es mas fuerte que las ganas de esperar y por flojera no vas al refrigerador por agua y lo empiezas a mezclar con las cervezas que tienes cerca, hasta que terminas usando el agua de la hielera…
Es entonces en ese momento… cuando sabes que debes detenerte, pero no lo haces. Como un accidente anunciado, como cuando te das cuenta que vas a chocar y solo cierras los ojos y aprietas las manos… para que, pase lo que pase, pase pronto.
Y... BOOM...! Pasa.
A la mañana siguiente tienes que recoger tu cochinero y pedir perdon...
Acompañados de estas líneas confusas, presentamos, un poco tarde… el video mas nuevo. Ya se la saben , le pican a la fotillo... y BOOM!
